Lubina a la espalda

Siempre había asado los pescados enteros, tengo buen ojo para los tiempos y no solía tener problemas de que quedaran secos y estropajosos. Y si me quedaba un poco corta con añadir unos minutos más en el horno, tema solucionado. Pero hace un par de años, un día que iba pillada de hora, se me ocurrió pedirle al pescadero que me preparara el pescado que estaba comprando (no recuerdo si era lubina o dorada) para hacerla a la espalda. Y, desde entonces suelo pedir que me los preparen así. 

Esta forma de hacer el pescado es muy cómoda. Se ahorra tiempo de horno y la operación de repartir las raciones es mucho más fácil, ya que no hay que estar abriendo el pescado, quitarle las espinas, etc. 

Ingredientes

Una lubina de 1 kilo y medio

2 dientes de ajo (o más si gustan)

1 chorro de aceite de oliva virgen extra

1 chorro de vino blanco de buena calidad

Una cucharadita de hinojo seco (si se tiene fresco, mejor)

Sal

Elaboración

Se pide en la pescadería que limpien la lubina, la abran y le quiten la espina y la cabeza.

Cuando se vaya a preparar, se precalienta el horno a 180º.

La lubina se coloca abierta en una fuente para el horno. Se sala por la parte abierta, se añaden el hinojo, los ajos aplastados, el aceite y el vino.  

Cuando el horno ya está a 180º se introduce la lubina y se tiene 15 minutos. Transcurridos estos, se apaga el horno y se comprueba el grado de hechura del pescado. Si está al gusto, se saca y se reparte. 

En el caso de que gustara más hecha, se mantiene dos o tres minutos más en el horno ya apagado y cubierta con papel de aluminio o de horno para que no se reseque. Cuidado con no pasarse de tiempo y punto de cocción.