Mi ensaladilla rusa

Esta ensaladilla rusa es uno de nuestros platos favoritos. Con los años, la he ido modificando ligeramente para adaptarla a los gustos de mi familia. Inicialmente, no le ponía zanahoria porque su sabor dulce no me llamaba demasiado y sí le echaba guisantes y pimiento morrón. Pero como a mi hijo no le gustaban estos dos ingredientes dejé de ponerlos y terminé claudicando ante la zanahoria. 

En mi opinión, la gracia de esta ensaladilla reside en dos cosas: 

• El atún tiene que ser en escabeche y, a ser posible, en migas porque aportan más sabor y son más jugosas (además de más baratas).
• La mayonesa tiene que ser casera, sí o sí. 

Ingredientes (para 4 o 6 personas)

4 patatas medianas hermosas

4 zanahorias

3 huevos

1 lata de migas en escabeche (230 gramos de peso escurrido)

Para la mayonesa

2 huevos grandes

Poco más de ¼ litro de aceite de girasol (sin llegar al ½ litro para que quede clarita)

Sal al gusto

El zumo de un limón. 

Elaboración

Se lavan bien las patatas, se ponen en una cazuela con agua con sal (en frío) y se cuecen hasta que estén al punto, ni demasiado blandas ni duras. Se comprueba con un pincho de brocheta y si entra con facilidad, ya están. No pongo tiempos porque depende mucho de la calidad de la patata, de la dureza del agua y de la altitud respecto al mar.

También se pueden echar las zanahorias, lavadas y sin pelar, y se va comprobando el punto y cuando estén hechas, se sacan. Si se prefiere peladas antes de cocer, yo las cocería en una cazuelita aparte.

En esta misma cazuela, cuando el agua esté hirviendo, se pueden poner los huevos a cocer, se tienen 10 minutos, se sacan y se ponen a enfriar (así, ahorramos tiempo y energía). 

Es conveniente, cocer todos los ingredientes horas antes de preparar la ensaladilla para darles tiempo a enfriarse. Se puede hacer la noche anterior, teniendo la precaución de no meter las patatas ya cocidas en el frigorífico porque si no se ponen "zapateras".

Una vez fríos, se pelan las patatas, las zanahorias y los huevos y se cortan en daditos pequeños, se echan en una fuente o en una ensaladera. Se abre la lata de escabeche y se escurre, se añade a la fuente y se mezcla todo muy bien. 

Es el momento de hacer la mayonesa. Yo utilizo el aceite de girasol porque prefiero que predomine el sabor del escabeche pero se puede utilizar aceite de oliva suave, fuerte o mitad y mitad, al gusto de cada cual. 

La mayonesa debe quedar ligera para que pueda mezclarse bien con la ensaladilla. Por eso, hay que tener cuidado con la cantidad de aceite que se añade. Cuanto más aceite se le añada, más espesa.

Una vez hecha la mayonesa, se va añadiendo al resto de los ingredientes hasta que se consiga una mezcla uniforme.

Se tapa la fuente con papel film y se introduce en el frigorífico hasta el momento de servir.