Pappardelle con calabacín y azafrán

En estos tiempos de confinamiento, tengo que ir tirando de lo que haya en el frigo y en la despensa (bien mirado, confinada o no, como siempre 😄 ). El caso es que tenía unos pappardelle al huevo, un par de calabacines y un bote pequeño de nata líquida para cocinar así que he buscado en un libro que tengo desde hace tiempo, llamado "La pasta clásica" de Guiliano Hazan, y encontré "Fettuccine alle zucchine e zafferano". Es decir al calabacín y al azafrán. 

En vez de los fettuccine utilicé los pappardelle que tenía. Los dos son pasta larga y se diferencian en que los pappardelle son más anchos (puede que haya más diferencias que ignore pero lo único que salta a la vista es su anchura). 

También he modificado las cantidades para adaptarlas a lo que tenía.

Ingredientes (para 2 personas)

Para la pasta

250 gramos de pappardelle al huevo (o la pasta larga que se tenga)

Agua abundante (unos 2 o 3 litros)

Sal

Para la salsa

300 gramos de calabacín (tenía 2 pequeños)

35 gramos de mantequilla sin sal

50 gramos de cebolleta

200 gramos de nata líquida

1/4 cucharita de azafrán picado

Sal y pimienta negra molida

3 cucharadas de queso parmesano rallado

Elaboración

Se lavan bien los calabacines y se secan. Se les quitan los extremos y, sin pelar, se cortan en bastoncitos de unos 4 cms de largo y medio cm de ancho. Se reservan.

Se pica la cebolleta en trozos menudos.

En una sartén se pone a derretir la mantequilla, a fuego suave cuidando de que no oscurezca. Se añade la cebolleta y se deja pochar hasta que esté blandita. 

Se sube el fuego a medio-fuerte y se echan los calabacines, la sal y la pimienta y se sigue cociendo hasta que estén blanditos. 

A continuación, se vierte a nata líquida y se añade el azafrán,se remueve bien y se mantiene unos minutos hasta que la salsa espese un poco (no mucho). Se apaga el fuego. 

Mientras tanto en una olla grande se pone el agua a hervir. Cuando llega a su punto de ebullición, se añade la sal (al gusto) y los pappardelle, revolviendo bien. Cuando vuelve a hervir se tiene cociendo a fuego el tiempo que indique el fabricante. En este caso lo tuve 7 minutos. Se echa la pasta en un colador, se escurre y se pone en la fuente donde se vaya a servir. Se añade la salsa, se mezcla bien, se agrega el queso rallado y se sirve inmediatamente.

Si no se tienen calabacines, se puede utilizar otra verdura, como puede ser el brócoli o la berenjena.