Berenjenas gratinadas con jamón ibérico y queso feta

A veces, no es posible hacer la compra de forma planificada y, a la hora de cocinar, hay que recurrir a lo que haya en el frigorífico... y yo tenía una berenjena hermosa y poco más. Bueno sí, también me quedaba un taco de jamón ibérico y una tarrina de queso feta. Y, como  se me habían acabado los quesos parmesano y grana padano que siempre suelo tener, le encargué a mi media naranja que, antes de llegar a casa, pasara por el súper y comprara un sobre de queso rallado. Y me puse a ello. 

Ingredientes (2 personas)

1 berenjena de unos 400 gramos

1 trozo de jamón ibérico

1 trozo de queso feta

40 gramos de mantequilla

35 gramos de harina

400 gramos de leche

Sal

50 gramos de queso rallado

Elaboración

Se corta la berenjena en rodajas de 1 cm, se echa sal por cada lado y se dejan reposar unos 30 minutos. Transcurrido este tiempo, se colocan en un recipiente cubierto con una tapadera, ambos aptos para el microondas. Si no tenemos tapadera se cubren con papel film al que se hacen algunos agujeros y se introducen en el microondas a máxima potencia durante 8 minutos.

El jamón se corta en trocitos y el queso feta se desmigaja.

En una sartén se pone la mantequilla a fuego suave para que se derrita. Cuando ya esta líquida se añade la harina y se da vueltas hasta formar una masa y, a partir de ahí, se va incorporando la leche poco a poco sin dejar de remover con unas varillas, se sala un poco (no mucho porque el queso feta y el jamón ya son salados de por sí) se añade la nuez moscada rallada, se siguen dando vueltas y se sigue añadiendo la leche hasta que vaya ligando, cuidando de que no espese demasiado.

Precalentamos el horno a 180º.

Ahora vamos a utilizar dos cazuelitas de barro individuales. Se coloca una capa de berenjena en el fondo de cada cazuelita, encima se ponen unos trocitos de jamón y de queso, luego otra capa de berenjena, el resto de jamón y de queso feta, se echa la bechamel y se termina cubriendo con el queso rallado.

Se introducen las cazuelitas en el horno durante 20 minutos hasta que el queso se dore. 

Se sacan y se sirven con cuidado de no quemarse pues el barro conserva mucho el calor.