Solomillo de cerdo en hojaldre

Hace varias Nochebuenas hice un solomillo Wellington pero, no sé si por las prisas o qué, el resultado no me terminó de convencer. Y se me quitaron las ganas de repetir la experiencia. 

Pero como todo pasa, últimamente tenía el runrún de volver a intentarlo. Y, esta vez, he optado por una receta más modesta y sencilla: Solomillo de cerdo envuelto en panceta ahumada (bacon) y, por supuesto, hojaldre.

Ingredientes (6 personas)

2 solomillos de cerdo de 500 gramos cada uno
2 planchas de hojaldre rectangulares
8 lonchas de panceta ahumada
1 huevo
Sal y pimienta al gusto

Elaboración

Se limpian los solomillos de la grasa que puedan tener y se salpimentan. 

Las láminas de hojaldre se sacan del frigorífico una media hora antes de utilizarlas. Llegado el momento se extienden sobre una superficie lisa y se estiran un poco. 

Cada solomillo se envuelve con 4 lonchas de panceta y se coloca sobre una lámina de hojaldre, enrollándola y plegándola por los extremos para que el solomillo quede totalmente envuelto. Se pintan con el huevo batido por todos los lados y en la parte superior se hacen unas incisiones en forma de cruz (o en zigzag o como guste más) para que salga el vapor durante el horneado.

Se pone papel de horno en el fondo de una bandeja y se colocan encima los solomillos.

Se precalienta el horno a 200º y cuando alcance esta temperatura se meten los solomillos durante 20 minutos. En este momento se les da la vuelta para que se doren, también, por debajo y se mantiene otros 5 minutos. Se apaga el horno y se mantiene dentro la carne 10 minutos para dejarla reposar. Transcurridos los cuales, se saca y se sirve.

Se puede acompañar con puré de manzana, puré de patata o alguna mermelada al gusto.