Parece que he vuelto antes de lo que esperaba 😀 y es que me apetecía subir esta receta ya que es la segunda vez que la hago y la primera no llegó a ver la luz al quedarse en el disco duro de mi cerebro y, como el pobre tiene cada vez menos memoria ram, me arriesgaba a olvidarme de ella por completo 😂
Los que me seguís ya sabéis que, cuando estoy en La Rioja, las verduras y otras viandas se acumulan en la despensa o en el congelador y tengo que ir dándoles salida, así que la semana pasada me puse a buscar y di con una bolsa de guisantes frescos desgranados y congelados de no se sabe cuando y los cocí. La cantidad era considerable de modo que tuve que irlos consumiendo por tandas: la primera la hice con cebolla pochada y taquitos de jamón serrano, la segunda fue a parar a unos huevos a la flamenca y algo tenía que hacer con la tercera y última y como disponía de poco tiempo eché mano de la Thermomix que hace las cremas como nadie 😀 y sin manchar apenas ni dar trabajo. A día de hoy ya hemos acabado con la producción de guisantes de la zona y menos mal porque ya se nos estaba empezando a poner cara de ídem 🤣
Una última cosa sobre los guisantes, viéndolos tan verdecitos pensaríamos que son verduras... pues no, pertenecen a la familia de las leguminosas, es decir son legumbres y con propiedades similares a éstas por lo que tienen un alto contenido de proteína vegetal, hidratos de carbono, vitaminas, minerales y fibra, vamos que nutricionalmente son de lo más completitos 😁
Y hasta la próxima que no sé cuando será 😘
Ingredientes (2 personas)
1 cebolla
1 puerro
300 gramos de guisantes cocidos
180 gramos de caldo de pollo
160 gramos de nata líquida
30 gramos de aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta negra molida
Elaboración
Para cocer los guisantes se pone una cazuela con agua y se lleva a ebullición, momento en el que se echan los guisantes sin descongelar y se mantiene la cocción 5 minutos, se apaga el fuego, se escurren, se pasan bajo el grifo de agua fría para que mantengan su bonito color verde y se reservan.
Se echa el aceite en el vaso de la Thermomix y se programa 6 minutos, temperatura varoma, velocidad 1.
Mientras tanto, la cebolla se pela y se corta en cuadrados y el puerro en rodajas y se añaden al vaso de la THX programando 5 minutos, temperatura varoma, velocidad 1. Luego se incorpora el caldo de pollo y le ponemos 20 minutos, a 100º y velocidad 1. Cuando finaliza el tiempo se echan los guisantes y trituramos 1 minuto a velocidad progresiva de 5 a 10. Quedará muy espeso, pero no pasa nada, se añade la nata, la sal y la pimienta negra molida, se tritura 1 minuto a velocidad 10, se abre el vaso, se baja la crema de las paredes y, antes de servir, se programa 5 minutos a 90º, velocidad 5. A continuación se sirve sola o con tropezones al gusto.
Y, en esta ocasión, he utilizado la tercera entrega de "Los guisantes contraatacan", así que envío esta receta al Proyecto 1+/-100 desperdicio 0 del Blog Thermofan de Marisa.
Buenísimo este plato que hoy nos dejas, tienes razón cuando pienso en guisantes siempre pienso en verdura y casi nunca los preparo como puré, me quedo con la receta me apetece un montón. Un beso
ResponderEliminarBuenas tardes/noches que con el cambio de horario todavía no sé a que atenerme 😁 Ten en cuenta que con estas cantidades para dos es un plato que llena bastante, con lo que recomiendo un segundo plato ligero.
EliminarBesos.
Hola Gloria. Los guisantes me gustan crudos, acompañando embutidos y queso, así se comen en mi pueblo, también en tortilla. En crema alguna he preparado, pero no es la que más ha gustado en casa, por lo que le concedo pocas oportunidades, pero la tuya me la comía a gusto, sin la nata para más señas, por lo demás, te rebaño el plato.
ResponderEliminarBss
Buenas tardes, Lola: ya sé que por Murcia y alrededores se estila comer las habas y los guisantes crudos, nunca me he acostumbrado a ello. En tortilla, sí que los como y alguna he hecho. Respecto a la nata, se puede sustituir por una cantidad similar de caldo, de lo contrario quedaría muy espeso porque al ser una legumbre engordan mucho la crema. Pero como no te van demasiado, tú sigue tomándolos en crudo como si fueran pipas 😀
EliminarBesos.
Hola, Gloria.
ResponderEliminar¡Qué gusto da, venir a tu cocina! Y es que siempre nos regalas cositas ricas, aunque tú y yo, tenemos conceptos distintos de lo que es cocina de reciclaje, jajaja…, aun así, me encanta que cocines todos esos restos que vas guardando de manera desmemoriada, jajaja…, ya que son platos fáciles y muy ricos, al menos a mi me gusta todo, y esta crema de guisantes, no iba a ser menos, y más siendo guisantes naturales, es decir frescos, aunque tú los congelaras, el sabor, comparado con los ultracongelados es muy distinto, y aunque a mí me gustan mucho también, si consigo guisantes frescos, sin duda es mi opción favorita.
Besos y vuelve cuando puedas, pero vuelve.
Buenos días, Concha: a mí, también me gustan mucho los guisantes, pero lo poco agrada y lo mucho cansa, así que tenía que darles vidilla antes de que se echaran a perder. Además, tengo que dejar hueco en el congelador que ahora llegan los productos de primavera y a ver si hay suerte y me siguen regalando cositas ricas 😀
EliminarNo suelo comprar guisantes congelados y, menos ahora, que me surten de ellos en temporada. Los que tenía no los congelé yo, ya me los dieron así, en una bolsa tamaño XXL.Yo suelo ser más comedida y los congelo en porciones para 2 o 3 personas a lo sumo ¿Qué necesito más? Pues descongelo dos paquetes y tan contenta 😀
Besos.
Buenos días, Concha: a mí, también me gustan mucho los guisantes, pero lo poco agrada y lo mucho cansa, así que tenía que darles vidilla antes de que se echaran a perder. Además, tengo que dejar hueco en el congelador que ahora llegan los productos de primavera y a ver si hay suerte y me siguen regalando cositas ricas 😀
EliminarNo suelo comprar guisantes congelados y, menos ahora, que me surten de ellos en temporada. Los que tenía no los congelé yo, ya me los dieron así, en una bolsa tamaño XXL.Yo suelo ser más comedida y los congelo en porciones para 2 o 3 personas a lo sumo ¿Qué necesito más? Pues descongelo dos paquetes y tan contenta 😀
Besos.
Cuando vayas a la Rioja de nuevo, dímelo y me meto en el maletero. Vaya gustazo tener a mano tanta verdura e ir dándole uso con recetas ricas.
ResponderEliminarComí guisantes frescos pequeñitos en el centro de Helsinki. Si te digo que mi hijo era un retaco, imaginarás el tiempo que hace. Nos los daban y nos los comíamos sin saber la razón por la que los regalaban. Recuerdo que hasta el crío los disfrutó y por eso, tengo claro que tu crema está de lo más buena. De todas formas, toda creación que sale de tu cocina, es siempre disfrutada, más si se viene al proyecto.
Besos y mil gracias.
Hola, Marisa: ¡Qué curioso lo de Helsinki! Os quedaríais ojipláticos 😂 A mi hijo, cuando era muy pequeño, le gustaban los guisantes, luego los aborreció (y eso que los hacía de Pascuas a Ramos) hasta tal punto que tuve que suprimirlos de mi ensaladilla rusa de aquella época que sí los llevaba.
EliminarBesos.
¡Hola, Gloria! No te hacía tan pronto por aquí, parece que es circunstancial, te seguiremos esperando.
ResponderEliminarVeo que le has dado usos muy diversos a tu fondo de guisantes, fantástico, porque es una leguminosa muy rica en propiedades y sabor.
Seguro que con esta crema triunfaste.
Feliz miércoles. Bstes.
Hola, Emma: yo tampoco tenía previsto volver porque, aunque cocino casi todos los días, no innovo mucho y me centro en recetas habituales y sencillas (pasta con salsa boloñesa, pimientos rellenos, currys, sopas de ajo para el frío y cosas así que ya están en el blog). Respecto a los guisantes, la receta que más me gustó fue la de los huevos a la flamenca, estaban de toma pan y moja, sobre todo por los huevos que eran de gallinas de campo 😀
EliminarBesos.
Hola Gloria,
ResponderEliminara mí los guisantes me gustan en todas sus versiones y con este tiempo que no termina de remontar, en una crema es cómo mejor sienta.
Disfruta de la Rioja
Besos ♥♥♥